Estábamos planeando un grupal de Sucker Punch que, desgraciadamente, se aplaza por diversos motivos. Pero bueno, parte de la tela está ya comprada, peluca pedida y etcétera que habrá que terminar para que luego no nos pille el toro. Una foto de la susodicha:
Por otro lado, tenemos un proyecto que dejé un par de años aplazado teniéndolo a medias. Yitán Tribal, uno de los personajes más significativos de mi infancia. De pequeña soñaba con ir de la princesa Garnet con su mono naranja y su pelazo largo, pero ese me lo haré más adelante, cuando tenga más ganas y no tantos trajes que quiero hacerme. En fin, me falta coser el chaleco, hacer las dos dagas, que no me haré las rosas del Dissidia que se hace todo el mundo; me haré las que él lleva al principio del juego, las dos dagas extrañas de narices, y un par de lentillas. Coser y cantar.
Y por último, uno al que le tengo especiales ganas, no me preguntéis por qué, si cada vez que juego a Silent Hill sufro como una asquerosa y grito como una descosida, pero bueno, me gustan porque al parecer me va el sado. La peli apenas si pude ver algo del miedo, pero bueno, al menos la oí y me enteré. Total, que como yo soy muy especialita, hasta le inventé un trasfondo bien bonito y bien sufrido a éste hombre, y me enamoré de él, aparte de que me apetecía disfrazarme de algo tocho, MUY TOCHO, acojonar al personal y molar over nine thousand, así que, con muchas ganas, y aunque en principio de lo que quería ir era de enfermera, he empezado éste proyecto, el señor Pyramid Head:
Por el momento sólo tengo hecha la base en cartón con las medidas. Mañana compraré el cartón pluma para hacer la cabeza definitiva. ¡Estoy que no quepo en mí!